Inmaculada García del Rosal, la doctora Inma, nace en Sevilla en el año 1971 y desde muy pequeñita tiene clara su vocación: Veterinaria. Por eso, marcha a Córdoba en el año 1989 para estudiar en la Facultad de Veterinaria de Córdoba.

Ya en Enero del año 1997, obtiene su Licenciatura en Veterinaria con la especialidad de Medicina y Sanidad, en la Facultad veterinaria de la universidad de Córdoba y comienza a realizar practicas en clínicas veterinarias de Rincón de la Victoria en Málaga, donde reside desde entonces.

El 28 de diciembre de 1998 abre su propia clínica en La Cala del Moral. Como se encuentra en la urbanización Serramar, de ahí viene su nombre: Clínica Veterinaria Serramar. Doctora Inma.

Tras varios años desarrollando su profesión, decide realizar la especialidad en Odontología y Cirugía Maxilofacial. Para ello, y con gran esfuerzo, marcha todos los jueves y viernes de los años 2007 y 2008 a la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid donde obtiene su especialización en Odontología y Cirugía Maxilofacial Veterinarias. Desde entonces realiza una gran labor como dentista veterinaria en la clínica dental veterinaria Serramar, también conocida como dentivet.

TERAPIAS NATURALES: Kinesióloga. Diplomada en homeopatía. Terapeuta de flores de Bach. Reiki tercer nivel. Canalizadora de Energía Universal. Terapeuta facilitadora en técnicas de regresión. Terapeuta craneosacral. Yatromateuta. Comunicadora animal.

Del mismo modo, es miembro activo de la SEOVE (Sociedad Española de Odontología Veterinaria) y ha participado como ponente, así como PRESENTADO pósters sobre esta especialidad que podeis ver en la clínica, por lo que ha obtenido un Premio a la mejor comunicación gracias a un caso de ortodoncia.

Certificada por el Instituto Asclepios con el Ciclo Fundamental y Ciclos Avanzados I y II en Yatromatesis.

Ha cursado el primer año en Antropología social en la UNED.

Titulada en MAT PILATES y reformer pilates.

En la foto, vemos a Inmaculada con su famoso gato Bigote. Este gato caminaba mal pero, cuando lo recogió Inma, estaba totalmente paralítico de las patitas traseras. Con mucho cariño y tratamiento ha podido llevar una vida normal durante 15 años. Esta foto es nuestro recuerdo pues nos dejó en Marzo de 2014. Siempre lo añoraremos.